🍃La rutina del éxito
Que no te confunda el título, que vamos a hablar otra vez de mi libro, pero te voy a contar algo que quizá te ayude, porque yo habría sido incapaz de terminar la novela si no lo hubiera hecho (5 mins)
Si alguien te ha reenviado esto, tu alguien me quiere mucho. Quiéreme tú también suscribiéndote:
Caminos de vuelta tiene tres partes.
Al otro lado del alba, el libro que se ha lanzado ayer, es la suma de las partes una y dos.
Pero la verdad es que no escribí las tres partes a la vez, ni siquiera en el mismo año. Terminé la primera parte el dos de agosto de 2022 y, un par de semanas después, me mudé a Australia.
Si te has mudado alguna vez, sabes que tu vida, durante un tiempo, consiste en apagar fuegos y hacer aterrizar una casa lo más amablemente posible. Pues cuando te mudas a la otra punta del mundo, lo mismo, pero en inglé, con mucho sol y canguros 🦘
Lo que pasa es que la primera parte de Caminos de vuelta funciona como una introducción a la fantasía de ese universo y es bastante autoconclusiva; de hecho, cuando leyeron el manuscrito, la editorial quería publicarla por sí sola como principio de la saga.
Así que, cuando ya había aterrizado mi casa en Australia, en vez de seguir con la segunda parte, me puse a escribir otra historia, porque me apetecía cambiar de mundo.
La escribía al golpito, como se dice por mi tierra, que es sin prisa y tanteando el tema.
O sea, cuando surgía un hueco en mi rutina y me apetecía llenarlo escribiendo en vez de con cualquier otra cosa. Obvio que no avanzaba demasiado. Además, por aquella época empezaba a dar clases mientras trabajaba en un bar, salía mucho de fiesta y tenía tiempo para poco más.
Pasa el tiempo, dejo el bar porque ya tenía demasiadas clases, sigo escribiendo mis cosas, y pasa algo.
—Samu, escribe algo para leerlo 😗
Un wasap de
.Como te habrás imaginado, por esa fecha no existía Miradero ni nada que se le pareciera, así que mi hermano sabía que escribía, pero realmente no había leído nada mío. Encantado, le pasé la primera parte de Caminos de vuelta.
Entonces, unas semanas después:
Le digo que gracias, que qué guay, hablamos de otra cosa, y después de un rato:
Aquello ya me dejó pensando, porque no era normal que insistiera tanto. Volví a recordar con cariño la historia, el universo y tal, pero seguí escribiendo la nueva.
Hasta que un par de días después:
Mi hermano había llegado a la mitad de la primera parte, donde hay un momento donde pasa algo que hace que se te caiga el culo al suelo, si la lees.
Pero esta vez, en vez de sólo reírme y darle las gracias, volví a abrir el documento para recordar esa escena de la novela.
Y terminé leyéndomela hasta el final, sin parar.
Primero, que mi hermano, que no lee NADA de ficción, le enganche algo de ciencia ficción fantástica (o así le llama la editorial, para mí sigue siendo fantasía). Segundo, que yo, autor, vuelva a un texto antiguo y, en vez de escupirme, como suele pasar con lo que escribiste hace tiempo, me atrape hasta el final…
Ahí había algo bueno.
Ese mismo día pausé la historia que escribía y retomé Caminos de vuelta, pero lo verdaderamente revelador, es que, por primera vez en mi vida, hice algo taaaaaan tonto como efectivo:
Agendarme sesiones de escritura en el calendario, como si fuera trabajo.
Con el cambio de horario con respecto a Australia la hora queda un poco rara, pero empecé con bloques de dos horas y media por la mañana, porque todas las clases que daba eran por la tarde.
Fue acomodándose y creciendo en mi rutina:
Hasta que luego se estabilizó (mucho), ya hasta el final:
Lo bueno de esto es que esos pantallazos son semanas reales, no es una programación ideal, era lo que hice durante meses, hasta que el tres de noviembre de 2023 terminé la novela. Otro día te cuento por qué se retrasó un año en salir.
Quizá por eso toda la estética de Miradero es verde, porque desde entonces tengo la escritura muy asociada al verde por mi calendario.
Obviamente hay veces que había cambios, cuando quedaba con alguien o hacía planes por ahí, pero todos los cambios sucedían sobre una base predecible.
Consejo para escritor novel:
Planifica una rutina y respétala: sé que te da miedo, pero tómate la escritura como una tarea profesional, no como trabajo: profesional.
Haz sacrificios al dios del tiempo: en mi caso, tuve que quitarme la mitad de las clases (lo que significa que durante meses estuve ganando la mitad de dinero). Busca la forma de darte espacio para escribir.
Deja de decirte que escribes por hobby, no es verdad.
Consejo para lector:
Consejo para escritor-lector:
Consejo para dinosaurio T-Rex que sobrevivió a la extinción y vive en una cueva a la espera del retorno de los grandes reptiles del espacio:
Si compras en preventa (antes del sábado 26 de abril) y me escribes a samuel@sdominguez.com diciéndomelo, te llevas un bonus:
Un vídeo de yo hablándole a tú explicándole la organización interna del Gremio de Suturadores; jerarquías, roles y tal (una de mis partes favoritas de la construcción del universo 🐵).
Así que sube a tocar ese botoncito verde y, después,
¡Besitos voladosss!
P.D.: Recuerda que si eres canario, la presentación del libro será el sábado 26 de abril en Las Palmas de Gran Canaria, allá lo podrás comprar en persona (sin que te violen los gastos de envío).
Te doy más detalles otro día ✨
Me conmovió la relación que tienen ustedes dos, porque hemos sido así mi hermana y yo. Que lindo ver el amor y cariño que se tienen ❤️.
Leí tu texto con una sonrisa que creció párrafo a párrafo. No solo por lo que cuentas, sino por cómo lo cuentas.
Tu historia me recordó que a veces la clave no está en tener la gran idea, sino en encontrarle un lugar en el calendario. Tan simple como eso. Tan difícil como eso.
Gracias por compartirlo sin pretensión, con humor y verdad. Me llevo lo esencial: escribir también es agendar, repetir, resistir, volver.
Y que sí, quizás también asociarlo a un color ayuda. El verde, en tu caso.
En el mío… quizá al tono que toman los corales cuando el sol del amanecer los toca y parece que por un momento lo entienden todo.
(Spoiler: estoy comenzando a escribir una novela… así que esta información me llega en el momento perfecto.)
Me paso a leer más de tu universo.
Un abrazo desde esta otra orilla,
Simón