🍃Reto de escritura imposible
Hoy no me apetece hacerte creer que soy un tío interesante y reflexivo, así que se me ha ocurrido hacer un juego contigo, o para ti, como los payasos de la tele (5 mins)
Hace una semana o dos escribí un correo como entrenamiento para forzarme a hacer correos más cortos. Una lectora,
, me preguntó qué necesidad había de forzarme a hacer algo que no me era natural.Le dije que hay veces que tener límites muy rígidos es el campo de cultivo perfecto para que surjan cosas maravillosas, cosas que serían imposibles sin esos límites. Por ejemplo, la poesía rimada utiliza esos propios límites como base de su belleza.
Sin esos límites, sería otra cosa (quizá bella también, como el verso libre, pero diferente) o no existiría.
Además, cuando te liberas de esos límites, vas sobrado, porque puedes desatar toda esa creatividad que estaba contenida. Es como Rock Lee, que entrenaba y vivía con pesos en las piernas y, cuando se los quitaba, le partía la madre a todo dios muy fácil.
Así que me he inventado un reto de escritura para ponernos fuertes de cojones.
Si alguien te ha reenviado esto, tu alguien me quiere mucho. Quiéreme tú también suscribiéndote:
Reglas del reto
Oraciones siempre de cuatro palabras (las subordinadas cuentan como nueva oración).
Después de las primeras siete oraciones, cuando ya esté creado un contexto, tengo que generar siete palabras aleatorias y utilizarlas en el orden que aparecen una en cada siguiente oración.
No puedo utilizar adjetivos (participios sí, para darle un poco alegría).
No puedo repetir verbos.
No puede rimar (esto es para evitar el abuso de participios a final de oración).
No puede ser una mierda sin sentido.
Obviamente, tengo que terminar antes de que sea la hora de publicación.
Soy yo aquel hombre
Soy yo aquel hombre, que en vano reza, hijo del ideal muerto. Sé que me acabo, como terminó aquel tal, que llaman mendigo ungido, señor del abandono.

Soy yo aquel hombre, que en vano reza, hijo del ideal muerto. Sé que me acabo, como terminó aquel tal, que llaman mendigo ungido, señor del abandono. Pero queda mi rancho, horrible coto del alma, donde sigo esperando escuálido. ¡Hecho piezas el ser! Ahora estoy tan vacío… Cuando al oeste amanezca, cuando el fraude de vivir…
Soy yo aquel hombre, que en vano reza, hijo del ideal muerto. Sé que me acabo, como terminó aquel tal, que llaman mendigo ungido, señor del abandono. Pero queda mi rancho, horrible coto del alma, donde sigo esperando escuálido. ¡Hecho piezas el ser! Ahora estoy tan vacío… Cuando al oeste amanezca, cuando el fraude de vivir —engaño último del diablo, quien hízolo creer regalo— haga humillar el rostro, como cerdo contra barro; podré agarrar mi esperanza, alcanzaré a profetizar callado, aunque necesite leer dentro, a mi frágil luz, el enigma de mí.
Segunda tanda
Eso fue un tanteo, para a ver cómo funcionaba el rollo, y quiero cambiar algunas cosas.
Reglas añadidas
Ahora sin participios, que no había pensado que en las palabras aleatorias pueden aparecer adjetivos.
Tiene que narrar una historia.
Una vez generadas las palabras, no puedo reescribir atrás.
Sí cabe el ramo
—Sí cabe el ramo.
—Digo que una rosa, ¿no ves que son…?
—¡Hermosas y quiero todas!
—Si las ponemos ahí, seguro vencerán el jarrón.
—Pa’ti la perra chica…
Fuera mugen las vacas. Se puede escuchar sólo, sobre su grosero parloteo, la réplica de pájaros. Y de pronto pánico: con insertar una rosa, símbolo de su prosperar…
Fuera mugen las vacas. Se puede escuchar sólo, sobre su grosero parloteo, la réplica de pájaros. Y de pronto pánico: con insertar una rosa, símbolo de su prosperar, nuevos trofeos de gimnasia, pregunta Clara su suerte:
—¿Fuiste después al callejón?
—¿Después de esterilizar todo? Corrí a mudar ropas; no aguanto su prosa. Padre nunca podría bendecir…
—Déjalo seguir su curso.
—¿Quieres pronto mi funeral?
Clara la mira envidiosa. Esa bomba de cuerpo, que atrás deja cementerio, no necesita un bendecir…
Clara la mira envidiosa. Esa bomba de cuerpo, que atrás deja cementerio, no necesita un bendecir. En su mismo contexto, ella sólo sabría dar.
—Eso no es importante. Mr. Grill tiene más…
—Calle que los gatos. Sólo otro irlandés hirsuto que viene todo ganso.
—Es un cliente glorioso, nunca regatea al pagar. Es quizá algo rústico, pero ¡qué importa vestir! Todos los días entra…
—Camina como pisando plátano.
—Irlandeses y sus tortas… ←(borracheras).

—Raros como una iguana. Puedo encontrar algo mejor.
Clara quisiera esa desconexión, despejarse del deseo brumoso. ¿Por qué entregarlo exclusivo? Una política para aislarlas, para forzarlas a confiar.
Ella tendría tres maridos. Como balas de pistola, cambiarlos sin media alucinación; apresurarse a ser libre, bailarina sin un director, soplar su propio cuerno y llorar felicidad aguamarina.
Sí cabe el ramo
—Sí cabe el ramo.
—Digo que una rosa, ¿no ves que son…?
—¡Hermosas y quiero todas!
—Si las ponemos ahí, seguro vencerán el jarrón.
—Pa’ti la perra chica…
Fuera mugen las vacas. Se puede escuchar sólo, sobre su grosero parloteo, la réplica de pájaros. Y de pronto pánico: con insertar una rosa, símbolo de su prosperar, nuevos trofeos de gimnasia, pregunta Clara su suerte:
—¿Fuiste después al callejón?
—¿Después de esterilizar todo? Corrí a mudar ropas; no aguanto su prosa. Padre nunca podría bendecir…
—Déjalo seguir su curso.
—¿Quieres pronto mi funeral?
Clara la mira envidiosa. Esa bomba de cuerpo, que atrás deja cementerio, no necesita un bendecir. En su mismo contexto, ella sólo sabría dar.
—Eso no es importante. Mr. Grill tiene más…
—Calle que los gatos. Sólo otro irlandés hirsuto que viene todo ganso.
—Es un cliente glorioso, nunca regatea al pagar. Es quizá algo rústico, pero ¡qué importa vestir! Todos los días entra…
—Camina como pisando plátano.
—Irlandeses y sus tortas…
—Raros como una iguana. Puedo encontrar algo mejor.
Clara quisiera esa desconexión, despejarse del deseo brumoso. ¿Por qué entregarlo exclusivo? Una política para aislarlas, para forzarlas a confiar.
Ella tendría tres maridos. Como balas de pistola, cambiarlos sin media alucinación; apresurarse a ser libre, bailarina sin un director, soplar su propio cuerno y llorar felicidad aguamarina.
Seguro que se me ha colado algún verbo repetido y algún adjetivo,
¡PERO!
No puedo revisar, tengo que publicar ya, que también es parte de las reglas.
Esta es la página que he utilizado para generar palabras, por si quieres probar a hacer el reto tú también (y si lo pones en comentarios, extra puntos para tú) ✨
¡Besitos voladoss!
Te dejo aquí el enlace al texto que cité arriba:
⮤ «Hace una semana o dos escribí un correo como entrenamiento para forzarme a hacer correos más cortos»
En cuanto tenga lucidez mental juego... Pero tendré que volver a leer las reglas!
Querido Samu el creador de textos imposibles, jugando con las palabras, gracias a ese ese jugador sempiterno, que aún ama escribir.
Gracias por mencionarme, esto es un honor para mí, cada vez me diviertes y sorprendes más.
Lo voy a intentar, parece divertido, desde luego tú eres el campeón absoluto de esto, acepto el reto!